domingo, 4 de noviembre de 2012

La CIA busca empantanar a Correa


Graig Murray 
22/10/2012
Hace un mes aproximadamente le pregunté a un antiguo colega del Foreign Office cómo veía [el secretario de asuntos exteriores] Hague el final del enfrentamiento por el asilo de Julian Assange y dónde estaba el espacio para la negociación. Mi amigo respondió con desdén -la política es simplemente esperar a las próximas elecciones en Ecuador en febrero de 2013. Estados Unidos y sus aliados estan convencidos de que Correa perderá, y mi amigo y yo, habiendo siendo diplomáticos durante muchos años, entendimos lo que Estados Unidos estaría haciendo para asegurarse ese resultado. Con Correa reemplazado por un presdidente pro USA, el asilo de Assange sería revocado, se invitaría a la policia metropolitana a entrar en la embajada de Ecuador para sacarlo y enviarlo inmediatamente a Suecia, desde donde podría ser extraditado a Estados Unidos para afrontar cargos de espionaje y ayuda al terrorismo.



Me ha asombrado la ingenuidad de los que preguntan por qué Estados Unidos no pide la extradición de Assange directamente al Reino Unido. La respuesta es sencilla - el gobierno de coalición. Los acuerdos de extradición son acuerdos internacionales entre gobiernos, y la decisión sobre su implementación es en último término política y gubernamental -esta es la razón por la que Teresa May y no un juez fue quien tomó las muy diferentes decisiones políticas finales sobre Babar Ahmad y Gary Mackinnon.

Los defensores de la CIA en el Reino Unido han argumentado ruidosamente que sería imposible que Suecia garantizara que Assange no será extraditado a Estados Unidos, con lo que estaría dispuesto a volver a Suecia a resolver el patético intento de hacerle la cama. De hecho, como los acuerdos de extradición son instrumentos gubernamentales y no judiciales, sería perfectamente posible que el gobierno sueco diera esa garantía. Auqellos que argumentan lo contrario, como Gavin Essler y Joan Smith aqui, no estan diciendo la verdad -sospecho que su vehemencia indica que lo saben.

La mayoria de parlamentarios liberal-demócratas comparten la noción de que Assange debería volver a Suecia para enfrentarse a las acusaciones de abuso sexual. Sin embargo hasta los repetidamente humillados parlamentarios liberal-demócratas se revolcarían ante la idea de que Assange sea enviado para ser encarcelado de por vida en aislamiento en Estados Unidos por su trabajo en Wikileaks. Esa es la razón por la que Estados Unidos no pide la extradición desde el Reino Unido, para evitar los problemas que esto provocaría a Cameron. No estoy especulando, ha habido intercambios diplomáticos de muy alto nivel sobre este tema entre Washington y Londres.

Había confianza en que el problema de Correa pasaría pronto, pero el Departamento de Estado ha sufrido un shock con la vuelta de Hugo Chavez. Como con Correa , los diplomáticos norteamericanos sénior se convencieron -y convencieron a La Clinton -de que Chavez iba a perder. La furia por el retorno de Chavez ha resultado en un diktat: no se debe cometer el mismo error en Ecuador.

Las operaciones de la CIA en Ecuador estan en cualquier caso muchos menos obstaculizadas que en Venezuela. Me entero de que el presupuesto norteamericano, usando principalmente fondos del Pentágono, dedicado a influir la elección ecuatoriana se ha casi triplicado hasta 87 millones de dólares desde el resultado venezolano. Este dinero encontrará el camino hasta los cofres de la oposición y será usado para financiar, sobornar o chantajear medios de comunicación y funcionarios. Puedes esperar escándalos mediáticos y picaduras de corrupción contra el gobierno de Correa en las próximas semanas.

No sé mucho sobre la política de Ecuador y realmente no sé cuáles son las oportunidades de reelección de Correa. Tampoco sé si si alguno de los partidos de la oposición son decentes o no en manos de los Estados Unidos. Pero sí sé que Estados Unidos quiere mucho que Correa pierda, que estaban muy confiados en que perdería y ahora no lo están. Desde su punto de vista, el peligro se encuentra en que al arriesgarse demasiado, sus esfuerzos serian tan obvios que les saldría el tiro por la culata con una reacción nacionalista. Mi fuente en Estados Unidos sin embargo esta segura de que la administración Obama no usará los fondos para incitar otro intento de golpe militar contra Correa. Eso aparentemente está descartado. Un Assange expulsado a los brazos de la CIA por una nueva dictadura militar podria ser dificil de vender incuso para nuestros vergonzosos medios de comunicacion dominantes.

Reacciones en la prensa latina a este artículo:

El Telégrafo
ecuadorinmediato.com
Ecuavisa
Telesur


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